miércoles, 28 de enero de 2015

Y todo tan LLeno de Nada

00:17

Cuando uno no lo sabe pero en la nada está el todo. Cuando no saber en que pensar significa pensar. Cuando la mente se abre lo suficiente para acallar a la pequeña o gran espiral de pensamientos inconexos con el  vórtice en los nervios.

Porque, en ocasiones, no hacer nada es hacerlo todo. Tomar el tiempo de no dar vueltas a los minutos, y dejarlos pasar, imitando a cualquier objeto que coge polvo en una mesita de una manera "inertemente" complicada, porque la física nos dice que está en continua fuerza con su entorno, y con el universo. Como nosotros.

Perderse en ningún lugar. Abstraerse de la película para ver el reflejo de dos miradas en el brillo de la pantalla.

Olvidar que se está escuchando y ser conscientes, por un momento de nuestra respiración como algo maravilloso completamente olvidado y "despensado".

Darse cuenta de que la historia también la escriben los silencios, de que la música no existe sin espacios en ausencia, tal y como lo bueno no existe sin lo malo, el color sin la falta de él.
Volver al estado primigenio de inconsciencia y dejarse llevar hasta el provocado mareo, que asociamos con nuestra lenta respiración no habituada, en lugar de dejarnos pensar que estábamos en otro lugar, en uno que también nos pertenece. El de la nada, el de dejarse llevar.

Salir de sí y entrar en sí, o en otros. Y dejarse volar. Dejarse reír sin motivo, dejarse saltar sin pensar en la cama arrugada, dejarse comer sin pensar en la estética, dejarse tumbar sin necesidad de sentirse culpable por no hacer.

Nuestro hábito y nuestra ley de la rapidez ciudadana nos ha llevado a pensar que el tiempo no aprovechado es aquel que se pasa sin "enriquecerse" a nivel educativo o bajo cualquier tipo de acción o hobby. Y la culpabilidad no nos deja tomarnos tiempo.

No nos deja recuperarnos tras relaciones de cualquier ámbito, no nos deja llorarnos, reírnos. En palabras de un buen amigo: "disfruta la tristeza, así como lo haces con la alegría, ya que sólo así vas a entender quien eres. Porque todo eso eres tú".
Y así, disfruta el silencio y la nada, y el "perderlo", como lo haces con el "ganarlo".

Una melodía maravillosa. Gracias por no escuchar.

00:37 (hoy tocan -1)

No hay comentarios:

Publicar un comentario